Actualmente en México, se ha calculado que existen más de 100 mil especies, de las que sólo se conocen cerca de tres mil y de éstas más de 200 especies son comestibles. Los registros apuntan a que se utilizan como alimento y medicina alrededor de 400 especies entre todos los grupos étnicos del país, número sobresaliente a nivel mundial. En Latinoamérica, México es el país que cuenta con mayor producción de hongos comestibles y medicinales, y se encuentra entre los 20 principales productores del mundo.
Existe una importante tradición etnomicológica ya que, desde tiempos prehispánicos, los hongos fueron utilizados por los indígenas en la alimentación, en la medicina, en las festividades y en diversas prácticas religiosas. El conocimiento de los hongos en México es sumamente antiguo; en Náhuatl, a los hongos se les daba el nombre genérico de Nanácatl, que significa carnes, plural de nácatl, carne, para los antiguos mexicas la deidad prehispánica que hacía brotar por la noche tales inflorescencias de la tierra era el dios Nanacatzin.
Con la gran cantidad de especies de hongos comestibles en nuestro país, el potencial de cultivo y utilización de estas especies es muy vasto. Estos hongos podrían ser catalogados como un buen alimento por los beneficios nutricionales y medicinales, probados a través de la historia. Algunas de las principales propiedades de los hongos son:
- Ayudan a bajar el colesterol y la presión sanguínea; con ello se previenen enfermedades cardiovasculares y otras relacionadas con la presión alta.
- Su alto contenido de antioxidantes y selenio ayuda a liberar radicales libres que dañan las células del cuerpo.
- Buena fuente de vitamina D, por lo que su consumo ayuda a que nuestro cuerpo absorba otros nutrientes como el fósforo, el calcio y el hierro.
- Son ricos en proteína, vitaminas, minerales y fibra, lo que los convierte en alimento ideal para personas que quieren controlar su peso o para quienes padecen diabetes.
- Contienen antibióticos naturales que ayudan a encarar diversas infecciones y ayudan a que el hígado, páncreas y otras glándulas endocrinas funcionen bien.
Veracruz, es un estado donde se puede disfrutar de estos, en la zona serrana y montañosa encontramos: tecomate, escobeta, panza, duraznitos, tzenso, mantequilla, trompa roja, entre otros, con los que se puede hacer un sinfín de preparaciones gastronómicas. La temporada de recolección comprende alrededor de tres meses después de la primera lluvia, aunque en algunos lugares dura todo el año.
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